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Ruta Las trincheras de La Jarosa

La Sierra de Guadarrama fue un enclave muy importante durante la Guerra Civil, por eso hoy en día podemos disfrutar de los restos de esa época y poder visitarlos y aprender de ellos. Además, de su Bosque Plateado, una zona llena de Pino Lariceo

Las trincheras

En este recorrido se podrán ver fortificaciones defensivas que ambos bandos construyeron en esta zona como métodos defensivos.

 

Es una ruta circular de dificultad media, con un tiempo estimado de dos horas y cincuenta minutos, y un recorrido de cinco kilómetros.

 

Para comenzar esta ruta hay que situarse en el Pino de la Tejera, tomando a la derecha la pista forestal hasta llegar a un cruce de varios caminos, llamado el cruce de las Conejeras. Desde ahí, habrá que seguir por La Vereda del Agua, que es el camino de la izquierda. Durante el recorrido podremos observar unas maravillosas vistas del embalse y del Pinar de la Jarosa.

A 150 metros, este sendero se cruza con una pista forestal, y enfrente se encuentra la Pradera del Horcajo, que os avisamos es la única fuente del camino, por si queréis aprovechar para hacer una parada y refrescaros.

 

Tomamos el cruce y continuamos por el sendero de la izquierda hasta llegar a la pista forestal por la que hay que bajar hasta llegar a un nuevo cruce, que nos lleva hasta el Cruce de las Conejeras, por ahí continuaremos hasta el punto de inicio.

Bosque Plateado

Al tratarse de una zona llena de Pino Lariceo, toda la zona ha sido marcada por esto; durante esta ruta descubrirás cómo afectó a esta tierra, y las diferentes formas de aprovechamiento de la madera.

 

Se trata de una ruta circular de dificultad media, con una longitud de 10,3 kilómetros y un tiempo estimado de 4,5 horas.

 

Hay que comenzar en el parking II, en el que te encontrarás un panel informativo, después hay que seguir por la pista forestal, tomando el segundo desvío a la derecha por la calle de los Álamos, aquí te puedes desviar del sendero durante unos 500 metros para pasear por la orilla del arroyo.

 

A lo largo de la calle de los Álamos, que en realizar es una pista forestal, hay centros de interpretación donde te informan de las diferentes actividades que realizaban en relación con la madera. También, se pueden observar en los pinos las marcas de la extracción de resina.

 

Continuando, pasaremos por un segundo arroyo, donde el camino se convierte en ascendente hasta finalizar en la pradera de Tomillar.

 

Al llegar a la pradera hay un cruce con la pista forestal asfaltada, por la que hay que continuar para llegar a la zona más densa del bosque, que es El Bosque Plateado, el cual debe su nombre a la corteza de los árboles.

 

El sendero termina en la pradera de la Covacha, desde la que se puede ver una gran vista de la Sierra de Guadarrama y de su risco. Desde este punto se inicio el camino de bajada hasta el punto de comienzo por la pista forestal, siguiéndola siempre recta sin desviarse hasta el punto de inicio.

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